La inteligencia artificial (IA) tiene sus raíces en la década de 1950, cuando Alan Turing propuso la idea de máquinas capaces de pensar. En 1956, el término "inteligencia artificial" fue acuñado en la conferencia de Dartmouth, marcando el inicio formal del campo. Durante las décadas de 1960 y 1970, se desarrollaron sistemas basados en reglas y lógica, como ELIZA, que simulaba conversaciones. Sin embargo, la falta de avances significativos llevó a los "inviernos de la IA", periodos de escepticismo y reducción de fondos.
En los años 1990 y 2000, el auge de la computación y el aprendizaje automático revitalizaron la IA. Avances como las redes neuronales y el acceso a grandes volúmenes de datos permitieron logros notables, como el triunfo de Deep Blue sobre el campeón de ajedrez Garry Kasparov en 1997. En la última década, la IA ha alcanzado hitos impresionantes, como el reconocimiento de imágenes, traducción automática y sistemas como ChatGPT, transformando industrias y la vida cotidiana.
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